Cómo ayudan los datos de comportamiento a optimizar tu Email Marketing
La cantidad de enfoques en Email Marketing es tan vasta como el número de segmentos en tu lista de contactos, lo cual implica que los mensajes que se generen deben ser relevantes para cada uno de esos grupos. Y ahí es donde brillan los datos de comportamiento con su posterior análisis, cuyo objetivo primario es facilitar la comprensión sobre las necesidades e intereses de los clientes con el fin de crear estrategias y campañas que aporten las soluciones requeridas.
Se trata de un camino coherente para enfrentar un escenario donde los consumidores varían sus modos y vías de interacción continuamente. Panorama que plantea mayores desafíos a las empresas e influye de manera directa en la experiencia de los usuarios y en la mejora de los indicadores de rendimiento.
Comunicación dirigida y optimizada
Las secciones que visitan antes de realizar una compra, los dispositivos y canales de acceso, el tiempo promedio que demoran en convertir, los productos que consumen habitualmente, etcétera. Eso y más es lo que abarcan los preciados datos que permitirán optimizar las estrategias por correo electrónico.
Pero ello también conlleva una labor de corte sicológico bastante significativa: comprender los sesgos cognitivos. O sea, los filtros mentales que influyen en las decisiones de compra y en la percepción que tiene tu suscriptor sobre un asunto específico. Por ejemplo, el miedo a la pérdida (FOMO) y la ilusión de mayor estatus.
Si bien, en ciertas ocasiones son empleados para incrementar las ventas, estos también pueden repercutir negativamente en la experiencia del consumidor e incluso en la gestión corporativa, por eso es indispensable que las empresas elaboren prácticas para revertir esa situación. En este texto encontrarás más antecedentes y en esta infografía puedes revisar la extensa cantidad de sesgos.
Ahora veamos cómo los datos que conducen este artículo aportan a mejorar tus mensajes.
1. Segmentación detallada
Sin duda, no es lo mismo tener una database exclusivamente con variables geográficas y demográficas, que otra donde además de esas categorías existen los datos de comportamiento. Mientras más completa sea, mayores probabilidades tendrás de crear campañas de Email Marketing que influyan en los destinatarios. Esto, porque a medida que la actividad del cliente entra en juego, la calidad de la segmentación es superior.
A partir de ahí, no solo es posible agrupar a los contactos según variables como el grupo etario o zona geográfica, sino que también puede hacerse por historial de compras, días y horas de navegación, dispositivo de acceso, etcétera. En síntesis, sumar el comportamiento a los criterios de filtrado, ayuda a crear segmentos dinámicos, que se actualizan en tiempo real. Así optimizarás considerablemente el perfilado de ofertas promocionales y de contenidos, dando solidez a la comunicación con los clientes.
2. Reducción de la tasa de abandono
Si tu campaña no hace clic con tu destinatario, quizás él la deje pasar una primera vez y decida darte una segunda oportunidad. Pero si los futuros mensajes se convierten en un sinsentido frecuente, entregan más de lo mismo o no cumplen sus expectativas, la posibilidad de abandono se convertirá en una intención real. Por eso es importante recabar datos de valor que den mayor libertad para diseñar experiencias cautivantes.
Sin embargo, no todo depende de la obtención de esos datos, también es clave lo que haces con ellos o cómo extraes su valor en favor de los usuarios. Tienes que encontrar los puntos de dolor, averiguar la causa del abandono, y a partir de ahí tomar las medidas correspondientes para frenar las pérdidas. Es decir, sin análisis, los datos no tienen utilidad.
3. Oportunidades a la vista
Las etapas exploratorias y de evaluación por la que atraviesan los contactos son un cúmulo de oportunidades para generar satisfacción, retener clientes e impulsar el engagement. E indudablemente, en ese entorno los datos de comportamiento se transforman en la punta de lanza para identificar contextos que no estabas considerando y que potenciarán el éxito de tu Email Marketing.
Por ejemplo, podría suceder que el segmento A no sea tan activo en las conversiones online, como lo son el B y C; pero que, frente a las ofertas de última hora o tiempo limitado, participe entusiastamente. Entonces, ese tipo de contenido sería el más idóneo para nutrir los envíos a sus correos electrónicos. Algo que no sólo incrementará la satisfacción, sino que además impactará de manera positiva en tu ROI.
Poner la lupa en las interacciones y el resguardo de la información
Durante las diferentes etapas de su recorrido, los clientes van cambiando el modo en que interactúan con los productos o servicios y las empresas. Transitan entre revisar las opiniones de los consumidores, ir directo a la compra, abandonar el carrito para retomarlo más tarde; comprar desde la aplicación móvil, ecommerce y/o marketplace, esperar una oferta o descuento atractivo, etcétera.
El asunto es que no necesariamente seguirán un camino como ritual en todos los procesos que inicien. Y frente a ese escenario cambiante, la recolección de los datos de comportamiento es crucial para crear campañas de Email Marketing personalizadas, capaces de mantener las tasas de participación, conversión y retención de los clientes.En consecuencia, para asegurarse de que el próximo movimiento sea el correcto, las empresas necesitan invertir en recursos que les permitan identificar las acciones de sus usuarios en torno a los distintos estímulos comerciales (productos, servicios, eventos, campañas, etcétera). Pero, por supuesto, no es una tarea a campo abierto; hay que respetar la privacidad de cada contacto y resguardar celosamente sus datos. A fin de cuentas, las buenas prácticas son el núcleo del éxito, de la confianza y de las experiencias entrañables.